Si a tu familia le cuesta despedirse de las vacaciones, toma nota de estas ideas para alargar el verano con escapadas de fin de semana.
1. Escapadas a la naturaleza
Nada mejor que aprovechar el buen tiempo del inicio de otoño para hacer planes al aire libre. Busca un bosque cercano y haz una ruta fácil con los peques, organiza un picnic o anímate a una salida en bici. Si viajas a zonas de montaña, los paisajes empiezan a teñirse de colores otoñales… y el éxito está asegurado.
Idea extra: muchos parques naturales organizan actividades educativas para niños, desde talleres de aves hasta juegos de orientación.
2. Zonas rurales con encanto
Un fin de semana en una zona rural es sinónimo de desconexión. Jugar en la naturaleza y respirar calma son siempre planazos que apetece disfrutar. Además hay muchas actividades que puede hacer toda la familia: desde rutas de senderismo o bicicleta hasta montar a caballo.
3. Ciudades con historia (a vuestro ritmo)
Visitar ciudades en septiembre es una maravilla, sobre todo porque las temperaturas suelen ser mucho más suaves. Elige un destino cultural cercano y recorre su casco histórico con calma. Los museos, castillos y visitas teatralizadas suelen tener opciones pensadas para niños, así que la experiencia se convierte en una aventura familiar.
4. Parques temáticos y de aventuras
Septiembre suele ser uno de los mejores meses para visitar parques temáticos, acuáticos o de naturaleza: hay menos colas, puedes encontrar entradas más económicas y los peques disfrutan a tope. Desde un safari hasta un parque temático, es una opción redonda para un fin de semana lleno de emoción.
5. Experiencias gastronómicas
¿Por qué no organizar una escapada con sabor? Rutas de tapas, visitas guiadas, ferias gastronómicas o fiestas locales. Comer, probar y descubrir productos típicos es también una forma de viajar con los sentidos.
Consejos para organizar tu escapada familiar:
Elige destinos cercanos: a menos horas de trayecto, más tiempo de disfrute.
Planifica actividades para todos: combina momentos de descanso con planes para los peques.
Aprovecha los festivos y puentes: el calendario de otoño está lleno de oportunidades para viajar.
Lleva ropa ligera y de abrigo: el otoño es traicionero y por las noches suele refrescar.
Como ves, no hace falta esperar a las próximas vacaciones largas para seguir viajando. Con un poco de organización, cada fin de semana puede convertirse en una miniaventura para disfrutar en familia.
